Las Comunidades energéticas de Elche liderarán el módelo europeo de ciudades autosuficientes y sostenibles
Se prevé alcanzar una cobertura del 100% del término municipal en menos de un año
Al menos 8 de cada 10 habitantes de Elche podría tener ya la oportunidad de participar en una comunidad energética
- Además de las comunidades energéticas, el gran potencial de autoconsumo en Elche lo representan sus polígonos industriales (especialmente el de Torrellano), con más de 100 MW instalables que podrían satisfacer hasta el 100% de la demanda eléctrica industrial de la ciudad
- En las II Jornadas de Elche Solar se darán cita destacados expertos locales, regionales y nacionales que, desde diferentes ámbitos, orientarán sobre cómo conseguir el máximo beneficio de la energía solar fotovoltaica, evitando posibles riesgos
- Estas Jornadas se conciben como un foro de debate, abierto, gratuito y especializado, para resolver dudas y plantear nuevos proyectos
- Las instalaciones solares fotovoltaicas permiten generar de forma propia la energía que se consume, lo que también puede suponer mayor riqueza a nivel local, más empleo y la mejora del medio ambiente.
Elche, 19 de junio.- Aunque se trata de un recurso aún emergente, ya existe un gran interés social por las denominadas comunidades energéticas, un servicio de generación de energía fotovoltaica que permite a los ciudadanos, en urbanizaciones, barrios, pueblos y ciudades enteras, compartir energía limpia tanto si se cuenta con paneles en el propio edificio como si no. Esto, aparte de otras muchas posibilidades de ahorro en la factura eléctrica y de mejora del medio ambiente, supone una oportunidad para aquellos ciudadanos que están interesados en aprovechar los recursos que puede ofrecer la energía solar fotovoltaica y que, por no disponer de tejado propio en su edificio, no podían plantearse hasta ahora contar con placas solares.
Los datos no dejan lugar a las dudas. El autoconsumo energético creció un 108% en 2022, colocándose más de 200.000 instalaciones residenciales con autoconsumo en España, según datos de la Unión Española Fotovoltaica (UNEF). Sin embargo, se estima que más del 65% de la población española vive en pisos, lo que, en principio, al carecer de tejado propio, se considera una traba para acceder al autoconsumo fotovoltaico. Esta dificultad puede ser superada con las comunidades energéticas.
Comunidades energéticas en Elche
La ciudad de Elche lejos de ser ajena a esta creciente realidad, se puede situar en pocos meses en un modelo seguir, colocándose a la vanguardia en España del desarrollo e implantación de comunidades energéticas, enlazado con la iniciativa Elche Solar, que pretende convertir a la ciudad ilicitana en autosuficiente energéticamente con instalaciones fotovoltaicas.
Y es, que, según se estima desde la empresa ilicitana Demesol, una de las pioneras y líderes en ingeniería fotovoltaica en la provincia, "actualmente, tan sólo con las iniciativas que nosotros ya tenemos proyectadas, se podría alcanzar a más de un 80% de la ciudad de Elche con comunidades energéticas". En concreto, como explica el gerente de Demesol y co-coordinador de estas jornadas, Demetrio López Sánchez, "contamos en este momento con 4 proyectos de comunidades energéticas (uno de los cuales ya está aprobado y en fase inicial de ejecución), que cubren gran parte de Elche, de forma que al menos 8 de cada 10 habitantes tendrían ya, si quisieran, la oportunidad de participar de éstas". Es más, añade, "la previsión es que en pocos meses la cobertura sea total, de forma que todo el ciudadano que viva aquí pueda acogerse a este servicio, si lo desea".
Pero la posibilidad de contar con esta opción no está exenta de dificultades. Por una parte, como reconoce el consultor de Energías Renovables Cayetano Hernández Gonzálvez, ingeniero aeronáutico, cofundador del IDAE (Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía) y co-coordinador de estas jornadas, "las distribuidoras son un agente importante para el desarrollo del autoconsumo y las comunidades energéticas en particular", así como apunta las limitaciones derivadas de "las trabas administrativas existentes y el retraso en la concesión de las ayudas Next Generation". Por otro lado, como reconoce el gerente de Demesol, "es fundamental la concienciación y educación de la ciudadanía, que se logra respondiendo sus dudas y aportándole información rigurosa, de calidad y contrastada".
Mostrando avances, resolviendo dudas
Y este es el objetivo prioritario de la II Jornada Elche Solar, que tendrá lugar en el Palacio de Congresos de Elche este miércoles, 21 de junio (coincidiendo, como la edición anterior, con el día del año que se disfruta de más horas de luz solar).
¿Qué son las comunidades energéticas? ¿En qué consisten? ¿Quién puede acceder a ellas? ¿Qué beneficios aportan? ¿Qué subvenciones hay y qué limitaciones? Estas y otras preguntas se responderán en una nueva edición de las jornadas Elche Solar que, de nuevo, pretenden reunir en un mismo foro a profesionales de la energía solar fotovoltaica, empresarios, instituciones y, fundamentalmente, a la población general interesada en conocer de primera mano las posibilidades, amenazas y ventajas que reporta la energía solar fotovoltaica, especialmente en Elche (que posee rasgos diferenciales y ventajas potenciales respecto a otros municipios).
La I Jornada Elche Solar, celebrada el pasado año por iniciativa de la empresa ilicitana Demesol, sirvió de foro de debate y de vivero de ideas, marcando un punto de inflexión en el conocimiento, aceptación y avance de proyectos encaminados a conseguir abastecer las necesidades energéticas eléctricas de nuestro término municipal mediante el uso de la energía solar fotovoltaica. Ahora se da un paso más, con el objetivo de consensuar un modelo de explotación y desarrollo de este recurso que sea nuestro, que sea respetuoso con el medio ambiente y, sobre todo, que llegue y beneficie a todos.
Esta es la finalidad de la II Jornada Elche Solar, que esta edición pone el foco en las comunidades energéticas. Es un foro gratuito, abierto, de discusión, reflexión y presentación de iniciativas, visibilizando el potencial que tienen los ciudadanos de Elche para conseguir un ingreso extra con el sol, fruto del ahorro en su factura energética. Destacados expertos informarán, desde diferentes ámbitos, sobre cómo conseguir el máximo beneficio a este recurso, evitando posibles riesgos.
En concreto, la jornada se ha estructurado en tres sesiones, concediendo un amplio espacio de tiempo al debate y las preguntas de los asistentes. En la mesa inaugural se analizarán las necesidades energéticas actuales y las posibilidades de ahorro que ofrece la energía solar, con la participación de destacados expertos universitarios, así como representantes de instituciones tan relevantes como el IVACE (Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial) o AMARA. Seguidamente, se abordará el potencial solar de Elche, con el fin de identificar oportunidades y recursos suficientes para lograr el autoabastecimiento energético con energía solar, y para ello se dispondrá de la intervención de representantes de empresas del sector, de la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (ASAJA), de la Unió de Llauradors y Ramaders, de la Asociación Empresarios Montajes Eléctricos y Telecomunicaciones Alicante (APEME) y del sector bancario (Cajamar). Y se culminará con una sesión especialmente interactiva, para responder dudas y establecer propuestas de presente y futuro, en una mesa con la participación de expertos en energías renovables, profesores universitarios, consultores y representantes de administradores de fincas, del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía de España (IDAE) y de la Unión Española Fotovoltaica (UNEF).
Lo tenemos (casi) todo
Por factores estructurales y por la coyuntura actual favorable, pero sobre todo por contar con rasgos particulares y diferenciales, la ciudad de Elche tiene un potencial extraordinario para el desarrollo y aprovechamiento de la energía solar fotovoltaica. De hecho, como asegura Demetrio López, coordinador de estas jornadas, "con la tecnología actual es posible abastecer todas las necesidades energéticas de Elche con energía solar fotovoltaica dentro de los límites del propio municipio".
Y es que uno de los aspectos cruciales que se debatirán en esta reunión pasa por analizar las posibilidades reales de que los habitantes de Elche puedan ser los propietarios de las instalaciones solares que les suministran la energía que consumen y, tras lograr su amortización en pocos años, les permitan obtener esta energía a un coste mínimo. Según estimaciones de Demesol, el coste de la instalación tipo que permitiera disponer de energía de muy bajo coste a las familias de Elche, incluyendo ahí el recibo de electricidad y movilidad con coche eléctrico, ronda los 9.000€ (con los precios actuales y sin descontar las ayudas existentes), amortizables en unos 4 años. Luego, en palabras de Demetrio López, "la energía que gasten para llevar una vida normal (luz, movilidad con coche eléctrico, ...) no les supondría coste directo alguno".
Pero no solo eso. Los expertos reunidos en este foro que defienden las comunidades energéticas también apuntan otras ventajas, que trascienden el ahorro directo que pueden suponer para la ciudadanía. "Es posible generar conocimiento sobre instalaciones solares, sus materiales, los sistemas que permiten su implantación, de forma que se puede crear en Elche una infraestructura de empresas del sector que potencie la creación de riqueza y de empleo local", asegura Cayetano Hernández Gonzálvez, quien subraya que el hecho de "poder obtener la energía muy cerca del sitio donde se utiliza supone importantes ahorros (al reducir costes de transporte) e incentivaría la puesta en marcha de instalaciones de consumo más eficientes, lo que redundaría en mayor trabajo para las empresas de instalaciones y construcción ilicitanas".
En cualquier caso, a juicio de este experto, que atesora casi 40 años de experiencia en la promoción de las energías renovables en España (desde 1984), "además de las comunidades energéticas, el gran potencial de autoconsumo en Elche lo representan sus polígonos industriales (entre los que destaca el de Torrellano)". Según sus estimaciones, "tan sólo ahí utilizando los tejados de las empresas situadas en todos estos polígonos sería posible instalar más de 100 MWp (megavatios de potencia), que podrían satisfacer toda la demanda eléctrica industrial de Elche".
En general, para Cayetano Hernández Gonzálvez, hay al menos tres razones esenciales que justifican la apuesta por la energía fotovoltaica en estos momentos:
- la bajada de precios de las instalaciones fotovoltaicas.
- la subida de los precios de la electricidad.
- las considerables ayudas que está ofreciendo la Unión Europea.
¿Qué es una comunidad energética fotovoltaica?
Haciendo un cálculo medio aproximado, se estima que anualmente una familia paga unos 1.000 € de la factura de la luz y unos 1.500 € en combustible para el transporte (generalmente, en coche propio); en definitiva, esto supone un gasto en energía de aproximadamente 2.500 €/año. Ante estas cifras, y si se dispone de techo propio, este ciudadano se puede plantear realizar una instalación solar de autoconsumo; y ahora, para aquellos que no tienen tejado en propiedad, existe la posibilidad de participar en instalaciones colectivas (reguladas por el RD 244/19 de Autoconsumo).
Recientemente se ha comunicado que en la Comunidad Valenciana el coste de las instalaciones de autoconsumo de energía eléctrica en comunidades de energías renovables se subvencionará hasta un 45%, siendo de 200.000 euros la cuantía máxima subvencionable por proyecto. El plazo para la presentación de solicitudes finalizará el 25 de julio de 2023.
Una instalación colectiva conformada como comunidad energética es una entidad con personalidad jurídica propia, cuyo objetivo es generar, gestionar, almacenar o consumir energía. Una comunidad energética de fotovoltaica alude a una asociación de personas, empresas y/o entidades públicas o privadas que basan en la fotovoltaica la gestión energética; esta unión se produce para construir una instalación fotovoltaica y explotarla para beneficio de sus socios. Estas comunidades se concentran en un territorio relativamente pequeño (un pueblo, un barrio o un polígono industrial).
La comunidad energética genera electricidad con las placas solares para el autoconsumo de sus socios. Aunque el fin de la comunidad no sea la venta de electricidad para ganar dinero, en los momentos en los que la generación supera al consumo, en algunos casos, es posible ceder a la red a cambio de una compensación económica (o por medio de otro mecanismo). Sin embargo, lo importante en una comunidad energética es fomentar la generación distribuida, generando beneficios ambientales al reducir el consumo de electricidad de origen fósil; además, se consigue el empoderamiento del ciudadano y la disminución de la dependencia de las grandes empresas energéticas.
La comunidad energética va más allá de lo que se conoce como el autoconsumo compartido, donde vecinos (particulares o empresas) realizan una instalación fotovoltaica común para su autoconsumo o la cobertura de servicios energéticos comunes; en vez de realizar varias instalaciones individuales, llevan a cabo el montaje de placas solares comunes y luego realizan el consumo en cada uno de sus suministros, de forma individual. En una comunidad energética pueden unirse vecinos de diferentes edificios, y estos pueden ser particulares, comercios, empresas e incluso entidades públicas. La figura de la comunidad energética fotovoltaica es más amplia y puede abarcar a una pequeña población, a un barrio de una ciudad, a varias empresas de un polígono industrial o, incluso, a un compendio de ellos que por cercanía pueden compartir los servicios de la comunidad energética.
Para más información
https://www.demesol.com
Jose Martínez Alberola.